Me pregunto que sería de mí sin mi música. Que cojones seria de mi. Para mí, la música es mi mundo. Por desgracia, no canto bien, ni toco ningún instrumento, pero por la simple razón de que nunca he tenido la oportunidad de aprender. Por mí, me habría dado cada sesión de guitarra. Sería flipante.
Para mí la música lo es todo. Lo es todo, porque es la que me ayuda, principalmente, a salir de mis bajones. Me motiva mucho escuchar alguna que otra canción de punk o de rock. Alguna canción de Nirvana, de Red Hot Chili Peppers o simplemente de SUM 41 me puede llegar a subir tanto la moral, que en cuestión de un par de horas, puedo volver a ser yo misma. Puedo volver a saltar, a brincar, y a ser de nuevo feliz.
No soy lo que esperas, ni tú lo que espero yo. Soy el punto discordante de tu pensamiento, la partícula defectuosa que rompe la molécula. Convierto tus pesadillas en sueños, o en sueños tus putas penas. Existo para quitarte la serenidad que has conseguido a base de años, porque una vez que empieces a leerme, no podrás dejarlo, o haré que no lo dejes, porque las palabras son droga, sobre todo si las conjugas como debería hacerse siempre.
Gracias, desde el 1 de Abril de 2013
Seguidores
Translation for you.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario