Ella, cada día, cada minutos que pasa de su horrenda vida, se hace un pequeñísimo corte en una parte de su piel. Muy duro tiene que ser para que el dolor físico te sea más leve que el emocional. El peor castigo para todos esos putos acosadores es que se les pague con la misma moneda. Claro, dirán, no pasa nada. Que miedo tengo. Todo ironía. Pero es más duro de lo que ellos piensan. Cada herida constata que ella sufre. Que llora. Que se quiere ir, pero tiene miedo. Quiere poder dejar su alma, que descanse en paz. Ella tiene miedo. Siempre lo tuvo. Aguanta, por miedo a lo que le pasará a su familia. Como se lo tomarán. Ella les quiere, no les quiere abandonar. Pero es duro. Cada vez es más duro sobrevivir a algo que no te deja respirar. Que con solo su simple presencia, te repudia. Duele sentirte rechazado por los demás, por unas injustas palabras. Duele que no te escuchen. Que no intenten conocerte. Que no tengan la mísera personalidad de ver con sus ojos. Tan poca gente así... pero ese es su destino. Hay que ser fuerte. Encontrar a toda esa gente que le quiere, que le apoya. Salir de su jaula. Dar a entender que ella no es quien se dice que es. Que es algo mejor. Que merece la pena apoyarla, ser su amiga. Escucharla, y quererla. Y os lo agradecerá muchísimo.
Poneros en el lugar de gente que este pasando eso. Preguntaros como podéis ayudar. Es duro. Es muy duro que por tonterías, simples rumores, te jodan la vida. Intentar ayudar, y escuchar. Será el mejor amigo que podráis tener nunca. Porque el/ella es sincero. Cosa que mucha gente no será. No os dejéis llevar. Tener personalidad y pensad porque no os lleváis con gente de ese tipo. Darles mimos, darles vuestro hombro para que pueden llorar, no traicionéis su confianza. Subirle la autoestima, se lo merece. Nos lo merecemos.
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