Con más de uno se me acabaría la paciencia. Y me refiero a gente que conozco como a la que no. Hay gente que se merece es toda regla una buena hostia en toda la cara para ver si se la ponen en su sitio. O sencillamente, sacando mis instintos asesinos, se deberia llevar cada uno un tiro en la puta cabeza para que así el mundo fuera mejor. Para que nuestros hijos tengan un futuro más seguro y menos duro que el nuestro. Que la vida actual fuese más comprensiva y empática. Awww.
Diariamente, me pregunto como la mayoría de la gente que me rodea puede ser tan infantil. A más de uno le aplicaría la normativa anterior. Les desearía lo peor de todo. Todo lo que estoy pasando yo para que se den cuenta de lo que hacen. De que esta mal. Y sobre todo, de que no tienen personalidad alguna. Es un gran problema esto. Uno grande. Uno al que hay que ponerle remedio inmediatamente.
No soy lo que esperas, ni tú lo que espero yo. Soy el punto discordante de tu pensamiento, la partícula defectuosa que rompe la molécula. Convierto tus pesadillas en sueños, o en sueños tus putas penas. Existo para quitarte la serenidad que has conseguido a base de años, porque una vez que empieces a leerme, no podrás dejarlo, o haré que no lo dejes, porque las palabras son droga, sobre todo si las conjugas como debería hacerse siempre.
Gracias, desde el 1 de Abril de 2013
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