Bum. Bonito sonido. Miles de significados. A mi me sugiere... me suena a "final".
Bum. Se acabó, ¿no? Desastre. Dolor. Romper. Desgarrar. Libertad.
Bum, cuando los sentimientos se desbordan sin poner objeción ni resistencia.
Bum, cuando la luz vence al vacío. La luz esa que me mantiene con vida, a flote.
[...]
Es como una lucha infinita de la que soy incapaz de huir. Una que intenta llenar con emociones mi marchito corazón. La tópica batalla entre el bien y el mal. La luz y la oscuridad. La felicidad y la tristeza. Pero a veces pienso y llego a estar completamente segura de que la indiferencia me asola. Y me da miedo. y la batalla vuelve. Mi inconsciente me dice que no me rinda, que yo no soy así, pero una voz dentro de mi me repite una y otra vez: "Ríndete. Déjalo. No puedes más".
[...]
Puntos suspensivos, así me siento. Y, de nuevo, me vuelvo a concienciar de que habrá mil enfrentamientos más, pero que no será esta vez cuando recupere mi descanso y abandone. En la que la oscuridad venza y yo, deserte. Un bum más, lleno de lágrimas que limpian mi alma. Un bum, que me devolverá la fuerza para resistirme a final.
[...]
Ayudame, estrella fugaz, a salir de esta, otra vez. Querido ángel de la guarda, pequeña luz que busca mi sonrisa diariamente. Acompañame y no me sueltes la mano, o me perderé, por favor. Solo quiero oír una vez más... "Patri, no cambies". Gracias, muchas gracias. Y no te olvides de protegerme, como haces a diario.
No soy lo que esperas, ni tú lo que espero yo. Soy el punto discordante de tu pensamiento, la partícula defectuosa que rompe la molécula. Convierto tus pesadillas en sueños, o en sueños tus putas penas. Existo para quitarte la serenidad que has conseguido a base de años, porque una vez que empieces a leerme, no podrás dejarlo, o haré que no lo dejes, porque las palabras son droga, sobre todo si las conjugas como debería hacerse siempre.